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La pizza italiana de nacimiento fue adoptada por todo el mundo, es la comida preferida para los fines de semana. Quién puede resistir a su delicioso aroma sino también por el irresistible sabor de sus ingredientes.
La pizza es un pan plano horneado, habitualmente cuya base es elaborada con harina de trigo, agua y levadura, y generalmente cubierto de queso mozzarella, salsa de tomate u otros ingredientes locales. Su popularidad ha hecho que se extienda por todo el mundo en una infinidad de variantes.
Las pizzas con ingredientes no tradicionales se conocen en Estados Unidos como pizza de gourmet o estilo California. La pizza hawaiana es un invento alemán, y generalmente consiste en una base de queso y tomate con jamón (a veces tocino) cubierta de rodajas de piña (ananá).
La pizza moderna se desarrolló hacia el siglo XVII en la ciudad de Nápoles, lugar donde existen las primeras referencias documentales acerca de los orígenes. Se dice que en la época del rey Fernando I , la reina había prohibido la pizza en la corte.
Pero Fernando, a quien le fascinaba, burlaba la orden disfrazándose de plebeyo para visitar a escondidas un barrio pobre de Nápoles donde se preparaba esta comida. Con el tiempo confesó su gusto y la pizza se convirtió en un gran éxito en toda Italia.
Las grandes empresas que venden pizzas a domicilio han facilitado su consumo y además han defendido con estudios avalados por nutriólogos que el consumo de este producto en una dieta equilibrada es benéfico, ya que concentra los ingredientes adecuados para una buena alimentación, como las proteínas, grasas, carbohidratos, vitaminas y minerales.
La palabra pizza, procede de Alemania. En el antiguo alemán bizzopizzo que significaba "mordisco y trozo de pan". En el siglo XII pizzo se convierte en pizza e indica "un pequeño pan redondo y tierno", típico de los pueblos lombardos.
Sin embargo, los panes planos son una tradición por todo el Mediterráneo. Quizás este pan que tenía un antiguo origen persa, fue introducido en la Magna Grecia (Italia meridional) por los primeros colonos griegos
Se han encontrado evidencias posteriores que datan del 79 d. C. en los restos de Pompeya. Las excavaciones arqueológicas han sacado a la luz tiendas con una gran similitud a una pizzería moderna.
Pizza 4 estaciones
250 g de harina
1/2 sobre de levadura
1/2 cucharadita de sal
3 cucharadas de aceite
1/2 taza de agua templada
100 g de champiñón fileteado
100 g de alcachofa en conserva
100 g de jamón de york
1 tomate
1 queso mozarella
6 aceitunas negras
1/2 lata de aceitunas verdes
Preparación:
Colocar la harina en forma de volcán sobre una superficie de trabajo y añadir la sal, la levadura, el agua templada y el aceite. Mezclar hasta formar una masa suave. Hacer una bola, colocarla en un cuenco, tapar con un paño y dejar reposar en un sitio cálido hasta que doble su volumen.
Estirar la masa con un rodillo y formar la pizza en una placa de horno, preferentemente metálica (o sustituir por bases de pizza ya hechas).
Trocear el jamón; picar las aceitunas verdes y mezclarlas con el jamón. En 1/4 de la masa colocar el jamón con las aceitunas, en otra el tomate en rodajas (pelado y escurrido de su líquido) con las aceitunas negras, en otra parte las alcachofas y en la última, los champiñones (escurrir todas las verduras bien para que no humedezcan la masa). Espolvorear con el queso rallado y el orégano.
Llevar al horno caliente, a 225ºC unos 15 ó 20 minutos. Servir al momento.
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